El PP de Vila-real denunció ayer en la comisaría de la Policía Nacional las pintadas a varios de sus carteles de publicidad electoral instalados en la ciudad. Los populares afirman que se trata de «amenazas recibidas en forma de pintadas, con insultos y que pueden suponer un delito de odio, tipificado en el Código Penal hasta con cuatro años de cárcel». Y aseveran desde la formación que hay «amenazas de muerte».

El líder del PP en Vila-real, Héctor Folgado, advirtió que «nada ni nadie nos va a callar y no vamos a permitir ninguna amenaza por parte de nadie». Y añadió que «los hombres y mujeres del PP seguiremos dando a conocer nuestras ideas y luchando cada día por mejorar la ciudad». E indican que «las pintadas amenazantes están firmadas por un grupo de extrema izquierda».

Por su parte, y a través de un comunicado oficial del Ayuntamiento, la corporación municipal «condena el ataque, con pintadas y amenazas, sufrido en el material de propaganda electoral del PP»; y muestra «el apoyo institucional» a la formación que encabeza Folgado en Vila-real. «En democracia no caben los insultos, los ataques ni, por supuesto, las amenazas», añaden.

En términos similares se pronunciaron desde el PSPV-PSOE, pero lamentaron que los populares «hagan uso de un tema tan serio como este para atacar al alcalde, dando a entender que el consistorio ampara estos hechos».