La Concejalía de Servicios Públicos de Vila-real acaba de acometer la reordenación de la parcela frente al colegio José Soriano, una actuación con la que se ahorrará en mantenimiento y mejorará la seguridad del peatón.

El concejal del área, Francisco Valverde, explica que se trata del solar en el que inicialmente se ubicaron las aulas prefabricadas del centro educativo y que posteriormente se asfaltó y valló para utilizar como aparcamiento. «Con el paso del tiempo, la valla ha ido recibiendo muchos golpes por parte de los vehículos que aparcaban, desperfectos que han requerido de reparaciones constantes, suponiendo un gasto de mantenimiento que ahora desaparece, al eliminar por completo el cercado», indica.

A esta intervención se suma la instalación, por todo el perímetro, de un bordillo especial que «sirve de tope para los coches y evita que invadan la acera, que se ha ensanchado, y que cuenta con una zona pintada de verde que delimita el espacio de estacionamiento para garantizar la seguridad de los peatones, que quedan completamente separados de los vehículos que aparcan en la zona», apunta Valverde.

Además, han repintado las plazas internas, de manera que, según el edil, ganan un párking «más funcional para los conductores» y generan «un entorno más seguro, siguiendo la tónica de este consistorio para crear una ciudad más amable», concluye.