Pasó la visita al siempre complicado Wanda Metropolitano, pero, sobre todo, el tormentoso encuentro ante el Athletic. Y con ellos una parte de las opciones del Villarreal de estar a final de temporada en una de las seis posiciones que darán derecho a disputar una competición europea la próxima campaña, aunque las opciones pueden aumentar con el desenlace de la Copa del Rey. Conforme está en estos momentos la clasificación, un triunfo de la Real Sociedad en el torneo del KO daría opciones al séptimo de entrar en la Europa League.
Pero, de momento, las derrotas —más o menos injustas— encadenadas a domicilio han descabalgado a los amarillos de la plaza continental. De la sexta posición anterior a la visita al Atlético, Europa se vislumbra ahora a cinco puntos de distancia.
Pero el Submarino afronta a partir de este domingo un tramo que debe aprovechar, empezando por la visita del Leganés a La Cerámica. El rival ante el que cayó la primera victoria de los de Calleja en esta Liga puede convertirse, ahora, en el punto de inflexión que marque la línea ascendente de los groguets. Los tres encuentros que le restan al mes de marzo, justo antes del próximo parón por los compromisos de las selecciones nacionales, se presumen como claves para no perder la estela de la plaza europea. Y los tres tendrán como contrincantes a equipos que, ya con dos tercios de la competición cumplidos, se encuentran con el agua al cuello y con el descenso acechando de forma muy seria. El Leganés, inminente rival, tiene ya la salvación a unos destacables cinco puntos. Algo menos límite es la situación del Mallorca, que también visitará La Cerámica para cerrar el mes de marzo. Entre los dos choques ante conjuntos en zona de descenso se situará la visita de los amarillos a Balaídos, ante un Celta que marca en estos momentos la frontera de la salvación.
El pleno de puntos en estas tres jornadas de Liga parece al alcance de la mano, pero para conseguirlo el Villarreal deberá desterrar la imagen endeble que ha dado ante muchos de los rivales de la zona baja. Excepto el 0-3 ante su próximo rival, el resto de marcadores ante equipos que están en la pelea por la permanencia ponen a los de Calleja sobre aviso.
REVERTIR LA DINÁMICA
En sus partidos frente a los otros cuatro equipos que cierran la tabla los amarillos se vieron sorprendidos ante sus aficionados frente al actual colista, el Espanyol (1-2 con el que los periquitos devolvían el 0-1 de la primera vuelta), situación negativa que también se produjo ante el Celta (1-3). El Villarreal también se fue de vacío en sus desplazamientos a Ipurua (2-1) y a Son Moix (3-1), evidenciando que los rivales de abajo se le están atragantando. Una dinámica que quieren empezar a cambiar. Europa depende de ello.
