El comité ejecutivo de la Cierval celebró ayer en Castellón su reunión periódica en la que además de las cuestiones de índole doméstica abordaron otros asuntos de interés general. Los empresarios trataron de manera especial las repercusiones de la economía estadounidense en el conjunto de las comarcas castellonenses y su impacto favorable en el desarrollo de las estructuras productivas tradicionales. El presidente, Rafael Ferrando que compareció acompañado por José Roca y Rafael Montero destacó también improcedencia de llevar a cabo la derogación del trasvase de agua que reclama la sociedad valenciana un proyecto vital para el desarrollo de la Comunidad Valenciana. Otros aspectos de la actualidad como la petición de liberalizar el peaje en la AP-7 entre Oropesa y Castellón y la elevada abstención en las pasadas elecciones europeas fueron merecedoras del analisis. Ahora bien, sería interesante que más allá de las meras declaraciones, los empresarios pasaran a la acción en la exigencia de todas las infraestructuras necesarias para el territorio valenciano, pues es necesario una voz unida para exigir al Gobierno central todas aquellas acciones encaminadas a nuestro desarrollo.