El catedrático Alejandro Nieto escribió hace años un libro titulado La organización del desgobierno, en el que trataba de explicar cómo a partir de buenas intenciones los gobernantes acaban creando unas situaciones aberrantes, contrarias a lo pretendido.

Eso pasa en Castellón. ¿Cómo es posible que dos proyectos tan interesantes como el aeropuerto y el gran complejo turístico entre Cabanes y Oropesa sean motivo de tanto despropósito?

El desgobierno es tal que se han olvidado de cumplimentar adecuadamente los papeles básicos para que el aeropuerto sea autorizado.

Y peor lo de Mundo Ilusión. Han creado tal lío que va acabar peor que la bronca entre Coca-cola y Pepsi. Al menos, los refrescos se han repartido el mercado mundial. ¿No hay nadie capaz de poner de acuerdo a empresas que pueden trabajar en mil PAI? Todo un desgobierno del PP que seguro tiene nombres y apellidos.

EL POLÍTICO QUE más manda en el agua después de Cristina Narbona, Adrián Baltanás, dijo ayer que lo del minitrasvase del Ebro se lo están pensando. Los suyos dejan a Joan Ignasi Pla a los pies de los caballos.