Hay referentes numéricos en nuestra cultura popular que, instalados en nuestra memoria, no necesitan mayor explicación cuando se les hace mención. Así, todo el mundo reconoce sin mayor problema el significado de muchos de ellos: Los Cuatro Jinetes de la Apocalipsis, las Doce Tribus de Israel, la Guerra de los 100 años, 1492, los Veinte poemas de amor de Neruda, como ejemplos de un amplísimo elenco del que podríamos elegir. Otros se han incorporado recientemente, como aquellos 21 gramos que dan título a la película de Alejandro González Inárritu, interpretada por Sean Penn y Benicio del Toro, en el que se hace referencia a la pérdida de peso que tiene un cuerpo cuando deja de existir vida en él, es decir, que 21 gramos sería el peso de nuestra alma (poco peso para tanta metafísica y filosofía derrochada en torno a ella).

¿Ustedes se han puesto a pensar lo que significan 10 segundos en nuestra vida? Pueden ser, por ejemplo, el tiempo que tardamos en decidirnos a besar por vez primera a la persona amada, con la trascendencia que ese acto puede tener para el resto de nuestra vida; es el tiempo que podemos tardar en asimilar una noticia antes de gritar de alegría o llorar de desesperación; o el que el hombre más rápido del mundo tarda en recorrer 100 metros; 10 segundos son los que duró la jugada que terminó en un magnífico gol del mediocampista Arana el domingo pasado en Castalia, y que le dio la victoria al Castellón sobre el Albacete. Como verán la importancia de los 10 segundos en nuestra vida no admite discusión.

Por eso es de justicia reconocer que el futuro de los 10 segundos como cifra mítica está más asegurado, no está claro si por celo profesional o por aburrimiento, gracias a la Policía Municipal de Castellón.

Así la semana pasada, una patrulla de este cuerpo policial consideró que 10 segundos de despiste en un semáforo merece la acusación de obstrucción al tráfico, con detención del vehículo y solicitud de documentación al "infractor". Ya saben: 10 segundos tienen la culpa de que usted pueda sentirse como un presunto delincuente del tráfico, si no espabila cuando el semáforo se pone en verde.

Licenciado en Historia