Ayer vivimos de nuevo el día grande de las fiestas de Sant Pere, la jornada más esperada por los graueros y graueras durante todo el año, en especial por las reinas del 2011 Sara Cambronero y Patricia Santacatalina. El día del patrón de Castellón tiene un sabor especial junto al mar, cuando los vecinos y vecinas saltan a las barcas y llevan en volandas al santo en una procesión que emociona tanto por su belleza como por la devoción que despierta.

Un año más se cumple la tradición y, un año más también vemos como el Grau de Castellón sigue creciendo, sigue disfrutando de más y mejores servicios. Porque hoy podemos disfrutar de más y mejores infraestructuras, de un entorno urbano con la mayoría de sus calles y plazas remodeladas. Contamos con un nuevo Mercat de Sant Pere y se han acometido las importantes obras del Barranco de Fraga. Hoy podemos disfrutar del más grande Centro de Salud Integrado de toda la Comunitat valenciana y los vecinos y vecinas tienen la tranquilidad de contar con un nuevo servicio de ambulancia y de un Parque de Bomberos.

Gracias al esfuerzo de todos, hemos reforzado el papel del Grau como referencia turística, cultural, gastronómica. Una oferta moderna, dinámica y de calidad que cada año atrae a más y más turistas.

Pero el Ayuntamiento de Castellón, dirigido por nuestro alcalde, Alberto Fabra, y la tenencia de alcaldía del Grau van a seguir trabajando por mejorar esa calidad de vida. En pocos meses veremos como el TRAM conecta el centro de Castellón y el distrito marítimo y también será realidad el nuevo Centro Social. Porque más que las obras, lo que nos importan son las personas, su bienestar y que encuentren un hogar donde llevar a cabo esos proyectos de vida. Y vamos a seguir reclamando aquellas infraestructuras que son vitales para nuestro futuro como son los accesos ferroviarios al sur a nuestro Puerto, que es el principal generador de empleo y riqueza del Grau.

Las Fiestas de Sant Pere son un buen momento para recordar de dónde venimos, cuáles son nuestras raíces, nuestras creencias más profundas, pero también una oportunidad para analizar el presente y trabajar, con decisión, por el futuro de todos los graueros y graueras. H