Hay comunidades autónomas en las que, si manda un partido y coincide con el que tiene el poder nacional, les dan de todo porque son de los suyos. Si no coincide, también se lo dan para que no protesten y estén contentos.

Pues todo lo contrario nos pasa a los valencianos. Si mandan en Madrid los que no lo hacen aquí nos discriminan por malos y, si mandan los mismos, nos discriminan porque, como somos buenecitos, nos aguantamos. Es una vergüenza: Los nuevos presupuestos generales del Estado siguen golpeándonos. Somos el 11% del PIB y de la población nacional, pues nos dan una inversión del 6% que se suma a la más baja financiación de España. Mientras el ministro Montoro vende austeridad, la deuda pública sigue creciendo hasta rozar el 100% del PIB, con la que de todos los ingresos se van más en intereses que en inversión y a los que más recorta, y menos da somos los habitantes felices ¿tontos? de la Comunitat Valenciana. Otros, si tienen e incluso crecen, es un agravio comparativo vergonzoso. Castilla y León o Galicia nos cuatriplican en inversión per cápita y casi todos los demás nos doblan o triplican y cada año recibimos menos. En ningún parámetro nos acercamos ni de lejos a la media nacional. No sé a que esperamos para dar un puñetazo en la mesa y decir basta. H

*Notario