Entramos en el mes de marzo, el mes de las Fallas, la primavera o la Magdalena y también de la Mujer. Y no, no reniego de ello, pero creo que no nos merecemos o, dicho de otra manera, la Igualdad, no se merece únicamente un mes o un día, se merece todo el año: los 365 días.

Porque es un derecho que tenemos que reivindicar y defender siempre. Las mujeres no queremos ser más pero tampoco menos. Queremos respetar y que nos respeten. Tan simple como eso.

«No es no», porque no vamos a dar ni un paso atrás en la lucha por la igualdad. Orgullosas del camino recorrido y con mucho más por recorrer y lograr llegamos a cada 8 de marzo.

El feminismo ha de ser inclusivo y sin dogmas. Ha de unir y no separar. Ha de ser de todas nosotras y también de todos ellos. Los hombres tienen que ser y sentirse parte de esta lucha. Tienen que acompañarnos con convencimiento y convicción, no de forma paternalista ni protectora. Como se suele decir: The real men are feminists.

La Igualdad es educar en valores desde edades tempranas. Es avanzar sin pedir paso ni permiso. Es no tener que sentirse juzgado por ser la pareja de o por llevar tal o cual vestido. Es no tener miedo de volver sola a determinadas horas de la noche. Es poder salir a correr con tranquilidad. Es tener las mismas oportunidades laborales. Es romper el techo de cristal a nivel educativo y laboral. Es conciliación familiar. Es sororidad. La igualdad es, al fin y al cabo, libertad.

Pero para esto, para cambiar la sociedad hay que articular políticas públicas que lo permitan. La Igualdad no se consigue diciendo portavozas, enarbolando carteles de nosotras y no situando después a candidatas en primera fila, o, incluso, poniendo en duda el papel de la Guardia Civil. La Igualdad es derribar barreras e ir avanzando en todos los ámbitos de la vida con pasos firmes.

En Ciudadanos no nos gusta dar lecciones, nos gustan los hechos. Somos muchas las compañeras que ocupamos puestos de responsabilidad en el partido. Yo misma, teniente alcaldesa y portavoz en Diputación, mi compañera Araceli de Moya, teniente alcaldesa en Oropesa, compañeras en Las Corts y en el Congreso, Begoña Villacís como vicealcaldesa en Madrid y esperemos que pronto también tengamos una futura presidenta del partido y de España como es Inés Arrimadas.

No por ello, estamos satisfechas. Una no puede estar nunca satisfecha mientras las oportunidades laborales para las mujeres especialmente en puestos de relevancia sigan siendo irrisorias. O mientras haya una sola mujer acosada, violada, maltratada o asesinada por el simple hecho de ser mujer.

Porque la verdadera Igualdad la conseguiremos cuando no tengamos que lamentar ni una más ni una menos. Ni en España ni en todo el mundo.

*Portavoz de Cs en la Diputación y en Benicàssim