Castelló ha cambiado bastante estos últimos años, sobre todo a nivel urbanístico. Hemos dado vida a los barrios periféricos y hemos dejado de dar la espalda al mar. Para empezar, el Grau ha dado un giro de 180 grados en tan solo cinco años, con un parque renovado de la Panderola, el nuevo quiosco de la plaza Josefina López, la adecuación de una zona verde junto a la avenida Ferrandis Salvador, la mejora de la seguridad vial de la avenida Harley Davidson o la organización de eventos clave como Escala a Castelló.
Si giramos la vista hacia los demás distritos de Castelló, nos encontramos una ciudad que por fin ha dado el protagonismo que se merece al peatón y al ciclista. Más carriles bici, más calles cerradas al tráfico y más terrazas para la hostelería. Además, queremos una ciudad sostenible, eficiente y bien iluminada. Por eso, en estos momentos estamos cambiando las luminarias de toda la ciudad a led para empezar un proceso de transformación eficiente y sostenible del 90% del alumbrado público urbano, que alcanzará a casi 24.000 puntos de luz de los seis distritos y reducirá el consumo energético, con un ahorro de 1,9 millones de euros en la factura anual.
Si hablamos de obras de transformación, podemos nombrar el camí la Plana, con 4,5 millones de inversión, que ha supuesto un antes y un después para los vecinos de la Marjaleria; o la mejora del camí la Fileta, con la repavimentación del vial y la reparación de los tramos de muro derrumbado en la zona, incrementando, de esta forma, la seguridad para vehículos y peatones. Asimismo, hace poco más de una semana se adjudicaron las obras de reforma del camí la Ratlla por 1,1 millones de euros. Atenderemos en los próximos meses una reivindicación histórica de la ciudad cumpliendo todos los requisitos sociales, ecológicos y de género que marca Europa.
Además de esto, la ciudad ha ido renovándose poco a poco, con la nueva avenida Enrique Gimeno, que ya cuenta con una rotonda dedicada al Deporte de Castelló; la conexión de la calle Carcagente con la Ronda Este; la ampliación de la red de baños públicos con 6 nuevos puntos estratégicos; o la mejora de la movilidad y comunicación del Raval Universitari y Crèmor con la construcción del Puente Europa.
Podría seguir con esta lista de proyectos e iniciativas del Ayuntamiento de Castelló, pero es evidente que la ciudadanía está viendo los cambios en su ciudad a nivel urbanístico. Son seis años de gobierno de progreso y, a pesar de que todavía hay mucho por hacer, nos sentimos orgullosos y orgullosas de la apuesta de la alcaldesa, Amparo Marco, por incidir a nivel urbanístico en aquellas demandas vecinales históricas. De lo que se trata es de mejorar la vida de la gente a través del urbanismo. Lo que para el Ayuntamiento es un proyecto de obra, para los vecinos y vecinas es un cambio radical en su día a día. Somos conscientes de ello y por eso seguiremos trabajando por llegar y transformar todos los barrios de Castelló.
Portavoz del equipo de gobierno del Ayuntamiento de Castelló
