El 2021 ha sido un año de ocurrencias, de parches y de política conformista. El tripartito ha demostrado que es incapaz de solucionar los problemas reales de la Comunitat Valenciana, como la infrafinanciación o la falta de agua. Además, la gestión sanitaria ha sido claramente deficiente. Su modus operandi para hacer frente a todas las olas ha sido el del cierre y la ruina en lugar de la previsión y la prevención y parece que sigue sin aprender de los errores del pasado.
Asistimos avergonzados al inicio del año político de este Consell. Destaca, por una parte, el caos sanitario y la nefasta gestión de la pandemia; y, por otra, el escándalo de presuntos abusos sexuales a menores tutelados. Las conselleras de Sanidad, Ana Barceló, y de Igualdad y Políticas Inclusivas, Mónica Oltra, no pueden seguir ni un minuto más ocupando sus cargos y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, por dignidad política, no puede seguir siendo cómplice.a llegado la hora de asumir responsabilidades políticas, destituirlas cuanto antes y que esos cargos sean ocupados por profesionales y buenos gestores.
Ahora, empezamos 2022 con la esperanza de que sea el de la recuperación, el del sentido común y el de las reformas. Ojalá llegue el día que Ximo Puig vea la luz, que sea capaz de mirar más allá de su ombligo y de su sillón, de pensar en los valencianos y en el futuro de la Comunitat Valenciana. Ojalá se aleje de los extremos, de las ocurrencias y de las trabas al crecimiento y lleve a cabo las reformas que necesitamos.
Desde Ciudadanos, empezamos el año con equipo y con fuerza para demostrar que hay una alternativa liberal frente al Consell sectario, populista y nacionalista. Seguiremos trabajando para el cambio, haciendo política útil, pero firme con el objetivo de defender las libertades y la igualdad de los valencianos.
*Portavoz de Ciudadanos en Las Cortes Valencianas