El Periódico Mediterráneo

El Periódico Mediterráneo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Basilio Trilles

BABOR Y ESTRIBOR

Basilio Trilles

La Brunete mediática

Algún estimado colega del periodismo, ahora en la legítima orilla de las instituciones públicas, reverdece en las redes el sambenito Brunete mediática, acuñado por el nacionalismo vasco para arremeter contra la prensa libre durante la etapa del ex jesuita Xabier Arzallus al frente del PNV, cuando el inefable Iñaki Anasagasti no daba abasto en las tertulias de radio y televisión. Según Anasagasti, en entrevista a La Vanguardia en 2002, la ocurrencia fue de él. En esa línea, al final de los noventa, Arzallus llegó a decir: «Los medios de comunicación están protagonizando un 18 de julio». Por si alguien no lo sabe: la División Acorazada Brunete era, no sé ahora, la unidad blindada más poderosa del Ejército español en 1981, cuando el 23-F. El Rey, Juan Carlos I, impidió que los tanques salieran a la calle, frustrando el golpe protagonizado por Tejero. La definición Brunete mediática viene a señalar como golpista a la prensa crítica con el poder de turno, siguiendo el argumentario de un Pedro Sánchez cada día más debilitado demoscópicamente, incluso por el CIS, que ha optado por sembrar el manido cuento de la involución de los medios de comunicación de la mano de poderes económicos para derribar al Gobierno. Nada nuevo bajo el sol.

Larra ya dejó dicho en el siglo XIX: «Escribir en Madrid (España) es llorar, es buscar la voz sin encontrarla, como una pesadilla abrumadora y violenta. Porque no escribe uno siquiera para los suyos». Cuando el poder está de capa caída es capaz de todo. Gracias a La Transición tenemos una Constitución, cuyo artículo 20 garantiza la libertad de expresión. Las urnas representan la verdadera Brunete democrática de quienes defraudan a la ciudadanía.

Periodista y escritor

Compartir el artículo

stats