En la política en positivo, en la que creemos la mayoría de los castellonenses, la que tiene como objetivos ayudar a construir una mejor sociedad y dotar de mejores servicios y oportunidades a todas las personas, no caben actitudes como las que actualmente están ocurriendo.
Aunque ya sabemos que los gobiernos de la izquierda siempre nos han conducido a la ruina por su nula eficiencia en la utilización de los recursos públicos, por las subidas de impuestos para poder mantener un gasto público incontrolado que siempre ha lastrado la competitividad de las empresas y la capacidad de las familias para consumir y ahorrar, porque siempre disparan el déficit y la deuda nacional, y por el aumento del paro.
En la actualidad, la mayoría asistimos atónitos a las actitudes de los dirigentes de la izquierda que a diario nos demuestran que su único objetivo es permanecer en el poder a cualquier precio. Aunque para ello destrocen el presente y el futuro de millones de personas de todo el país.
Para estar en el gobierno, Pedro Sánchez primero decidió vincular al PSOE a la izquierda radical y los independentistas, priorizando permanecer en el Gobierno antes que defender la unidad y las bases constitucionales de nuestro país. Y en ello están, con concesiones continuas, sin escrúpulos, a independentistas y a los herederos políticos de ETA, para conseguir aferrarse al poder por encima de todo y de todos. Un gobierno insolvente de Sánchez al que Puig tampoco le reclama nada, aunque margine a la Comunidad Valenciana perpetuando la peor financiación por habitante de España, aprobada por Zapatero. Todo para seguir en el poder, Sánchez y Puig.
Destrucción de puestos de trabajo
Y, por si fuera poco, seguimos asistiendo atónitos también a las reacciones de los dirigentes socialistas de la provincia, todos ellos alabando y aplaudiendo a Sánchez también para intentar aferrarse al poder. Que Sánchez rompe por intereses personales las relaciones con Argelia, que obliga a España a pagar un 70% más por suministro de gas, y que seguramente provocará el cierre de muchas empresas cerámicas de la provincia y la destrucción de miles de puestos de trabajo. Le aplauden.
Que Sánchez margina a la provincia de Castellón, con una ejecución nula de las inversiones previstas en 2022 en la provincia y con una previsión para 2023 que disminuyen un 14% las de este año. Y encima, en los Presupuestos del Estado para 2023 se prevé un incremento del 7,7 en la recaudación en el Impuesto sobre la Renta para los castellonenses. Pues nada, ante estos datos, los dirigentes socialistas de la provincia le continúan aplaudiendo.
Y ahora, cuando los dirigentes socialistas han aumentado la deuda hasta unos niveles inasumibles para el futuro de los españoles, y cuando ya ninguna encuesta les sale favorable, estos dirigentes socialistas han decidido aplicar políticas de tierra quemada, como si todas las personas fuésemos sus enemigos a los que hay que arruinarles el presente y el futuro.
En la política en positivo, en la que creemos la mayoría de los castellonenses, no vale todo para aferrarse al poder. En la política en positivo hace falta arrimar el hombro, para construir, entre todos, una sociedad mejor, con mejores servicios, riqueza y oportunidades para todas las personas.
Portavoz en la Diputación de Castellón y secretario general del PP en la provincia de Castellón
