La industria cerámica castellonense está atravesando una de las crisis más graves de toda su historia. Una crisis coyuntural contra la que no tiene herramientas para luchar y que está amenazando el futuro del clúster y, por extensión, el de toda una provincia, la nuestra de Castellón.
Ya hace muchos meses que los empresarios lanzaron la voz de alarma y pidieron ayuda al Gobierno de Pedro Sánchez para poner freno a la subida del precio del gas, pero la respuesta siempre fue el silencio. El PSOE ha demostrado su total incapacidad para ofrecer soluciones eficaces a los problemas del sector, cuyas empresas se han visto obligadas a parar hornos, a cerrar plantas y a presentar ERTE y hasta ERE. ¿Los socialistas no comprenden que el sueldo de más de 70.000 personas depende, de una u otra manera, de la cerámica?
Alzar la voz
Desde el Partido Popular hemos alzado la voz. Nuestro presidente, Alberto Núñez Feijóo, se reunió con los representantes del sector, escuchó sus problemas y propuso soluciones para garantizar la rentabilidad del sector. Medidas para que nuestra cerámica mantenga su liderazgo mundial, alcanzado gracias al esfuerzo de empresarios y técnicos cerámicos: Castellón es la cuarta potencia productora azulejera del mundo y la segunda mayor exportadora.
Y es más, nuestra presidenta provincial, Marta Barrachina, es la responsable del gran acuerdo que esperemos que se alcance por parte de todos los municipios azulejeros en la Diputación, y que ya se propuso hace meses… Ahora, los socialistas de la provincia deben convencer a Pedro Sánchez de que debe apostar por la cerámica. ¿Serán capaces? Las cartas están sobre la mesa y el reloj corre muy rápido. No podemos perder más tiempo. Urge actuar. Seguimos.
Senadora del PP y portavoz del PP de Castellón
