La ministra de Sanidad, Ana Pastor, explicó ayer que ha pedido a sus colegas del área de Schengen, países que, entre ellos, permiten la libre circulación de personas, que "extremen", como España, los controles de pasajeros que aterrizan en sus aeropuertos procedentes de zonas afectadas por la neumonía atípica.

Pastor señaló que las autoridades sanitarias controlan a los ciudadanos que desde las zonas de riesgo llegan al país a través de aeropuertos españoles.

El problema puede consistir en que escapen al control los viajeros que parten del sudeste asiático y cambian de avión en un país de Schengen --Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, Finlandia, Francia, Holanda, Grecia, Italia, Luxemburgo, Noruega, Portugal y Suecia--, por lo que, insistió, se les ha pedido que "se actúe conforme a lo que nosotros entendemos que es lo riguroso en este momento, del mismo modo que actuamos en España".

España, apuntó, "fue el primer país UE que, al día siguiente de que se declarara la alerta, puso control a la entrada de todos los vuelos que procedían de la zona de riesgo", cuyos pasajeros reciben un cuestionario en el que se les pregunta si padecen algún síntoma de la neumonía para someterles a seguimiento.