El mal estado del mar impidió ayer que un equipo formado por cinco expertos capturara y trasladara el tiburón gris que ronda cada día la playa del Miracle de Tarragona al Acuario de Barcelona. El dispositivo se montó sobre las 7.30 horas y se desmontó a las 14.00 horas, aunque hoy se volverá a intentar llevar a cabo la operación.

Mientras tanto, el Ayuntamiento tarraconense mantiene la prohibición de bañarse en la playa del Miracle, donde patrullan policías locales.

Dos técnicos del Acuario de Barcelona, un experto en tiburones y dos más en captura de peces vivos intentaron la captura. "Es relativamente peligroso, pero tememos más por la gente, se han oído comentarios de traer un arpón", comentaron los técnicos, que han descartado dormir al ejemplar porque se desconoce su peso, y se ha optado por utilizar una red.