Según el Informe de Juego en España del 2010, la recaudación de los juegos de gestión privada ha bajado el 7,08% en cinco años. En el mismo periodo, los juegos de gestión pública han tenido un comportamiento dispar: mientras que los de Loterías y Apuestas del Estado han bajado solo un 0,57%, los de la ONCE han perdido un 13,02%. Sin embargo, el juego privado se lleva la mayoría del pastel: del dinero jugado en el 2010, el 58,1%. El 35,09% fue para Loterías y el 6,81 para la ONCE.