El Gobierno estadounidense, a través de la Federal Trade Comission (la oficina de atención a los consumidores), ha llamado a capítulo a Facebook para que dé explicaciones sobre las nuevas condiciones de uso que la red social pretendía implantar esta semana. Varias asociaciones de consumidores habían denunciado que las pretensiones de Facebook de utilizar perfiles para que sus anunciantes y asociados insertaran publicidad asociada violaban los compromisos de la empresa adquiridos en el 2011 tras una trifulca similar. La red social ha parado los cambios y su fundador, Mark Zuckerberg, ha viajado a Washington para reunirse con varios senadores republicanos, a los que la empresa da apoyo.

Los usuarios de Facebook recibieron el 29 de agosto un correo electrónico de la empresa invitándoles a comentar y discutir las nuevas normas de uso, que preveían implantar en los siete días siguientes. El procedimiento es política de empresa tras las quejas de los usuarios en el 2009 que obligaron a la red a dejar de utilizar los datos de compras de sus clientes para ofrecer sistemas de recomendación a los anunciantes (el llamado Beacón).

El pasado día 6, Facebook anunció que daba por concluido el “plazo de comentarios” y que “en breve” publicaría la nueva política de uso. Esto, de momento, lo ha paralizado el Gobierno estadounidense, obligando a la red a justificar los motivos del cambio y a argumentar las razones del mismo. Hace dos años (aunque fue ratificado en el 2012), la red social ya tuvo que pactar con el mismo organismo que solicitaría el consentimiento expreso de sus usuarios antes de compartir su información más allá de lo establecido en las políticas de privacidad, que ahora quiere cambiar.

LAS QUEJAS // La acción del Gobierno llega tras una carta pública de varias organizaciones de consumidores y de protección de los ciberderechos, pero también organizaciones vinculadas con el ámbito de la sanidad.

La espoleta ahora llega desde las televisiones alentada por la nueva subida de Facebook en la bolsa. La red ha firmado un acuerdo con varias cadenas, como CNN y NBC, y algunas plataformas de noticias, para que accedan a las estadísticas de conversaciones de los usuarios para detectar historias a través de palabras clave o etiquetas (hashtags). Esto supone equiparar Facebook a Twitter con la diferencia de que en Twitter todo es público mientras que en Facebook los usuarios tienen la impresión de que hablan solo con su círculo de amigos y sus conversaciones no trascienden. H