La Organización Mundial de la Salud (OMS) no recomienda que los países emitan «pasaportes de inmunidad» para aquellos que se han recuperado del covid-19, pero está considerando seriamente la posibilidad de implementar certificados de vacunación electrónica, como los que se están llevando a cabo en Estonia. Este país báltico comenzó en octubre con un proyecto piloto de certificado de vacuna digital, una «tarjeta amarilla inteligente» para su uso eventual en el seguimiento interactivo de datos de atención médica y para fortalecer la iniciativa COVAX respaldada por la OMS para impulsar las vacunas en los países en desarrollo.