Habla el conductor de autobús que recuperó los 1.400 euros perdidos por una pasajera: "Hice lo que había que hacer"

La afectada, de 85 años, se había dejado olvidado el bolso en el vehículo en Gijón

"Mi recompensa personal es que la gente que viaja con nosotros estén tranquilos", defiende el trabajador

Un autobús de Emtusa. En el recuadro, el conductor que devolvió los 1.400 euros a la vecina octogenaria que los había perdido.

Un autobús de Emtusa. En el recuadro, el conductor que devolvió los 1.400 euros a la vecina octogenaria que los había perdido. / LNE

S. F. L.

El conductor de Emtusa (empresa municipal de autobuses de Gijón) que encontró 1.400 euros en su autobús y se los devolvió a su legítima propietaria quita importancia a su encomiable acción. Sucedió el pasado 9 de enero, en torno a las 15.30 horas, cuando el chófer, trabajador de la empresa municipal, localizó un bolso con un teléfono móvil, documentación y una importante cantidad de dinero en su interior. El empleado solicitó la presencia inmediata de un inspector en el vehículo para activar el protocolo y dar aviso a la Policía Local. "Hice lo que tenía que hacer. Estoy alucinando un poco con la repercusión que ha tenido", manifestó el conductor, que se llama Carlos Sáez y acumula 17 años de vida laboral vinculada a la empresa.

Gracias a la documentación hallada en el bolso, los agentes pudieron localizar a la propietaria, una mujer de 85 años, que se lo había dejado olvidado. Gracias, también, a que Sáez lo vio a tiempo. "Después de cada trayecto solemos darnos una vuelta por el autobús para ver si alguien ha olvidado algo. Encontré un bolso de mujer y lo abrí para ver si había documentación. Al abrirlo, vi un móvil pequeño y un sobre con dinero", recuerda el empleado, que explica que alertó del hallazgo a su inspector de inmediato y que ambos dejaron después las pesquisas para dar con la propietaria en manos de la Policía Local.

"En un autobús, por desgracia, siempre se olvidan muchas cosas y uno hace lo que tiene que hacer. He devuelto muchas carteras con dinero, algún reloj, móviles... Es nuestro trabajo", defiende el conductor, que considera que esta labor de vigilancia le aporta una gratificación personal. "Queremos que la gente que viaja con nosotros, además de que le sea útil y se sientan a gusto, vayan con la tranquilidad de saber que, si se les olvida algo, lo podrán recuperar. Esa es mi recompensa personal", afirma el trabajador.