El velero francés Goana, apresado el viernes por el buque de la Agencia Tributaria Petrel a 220 millas al oeste de Azores con 540 kilos de cocaína a bordo, valorada en 40 millones de euros y que se iba a distribuir en España, llegó ayer al Arsenal Militar de Las Palmas.

Esta operación, en la que han colaborado las autoridades aduaneras francesas, ha supuesto la detención de los dos tripulantes del velero, uno francés y otro brasileño, según el subdirector de operaciones de la Agencia Tributaria, Manuel Montesinos.

La investigación, en la que se ha decretado el secreto de sumario, está dirigida por el titular del Juzgado Central de Instrucción n° 4 de la Audiencia Nacional, Fernando Andreu, quien también es el responsable de otra operación independiente desarrollada el mismo día.

Esta otra operación, desarrollada por la Agencia Tributaria, con apoyo de la Royal Navy y la colaboración de las autoridades aduaneras británicas, aprehendieron más de 3.600 kilos de cocaína que transportaba la embarcación torpedera Cork, con bandera de Honduras y detuvieron a los ocho tripulantes.

El barco fue sorprendido cuando navegaba a 420 millas náuticas al suroeste de Vigo, localidad a la que llegó el pasado sábado.

Respecto al Goana, Montesinos explicó que la droga iba oculta en dobles fondos dentro de los mamparos, en un depósito de agua, y debajo de una mesa.

La investigación apunta a que la cocaína del Goana iba destinada a España, posiblemente a Galicia, "porque el velero estuvo en puertos del norte de España antes de partir hacia el Caribe".

A finales de abril, el velero salió de un punto cercano a las Antillas francesas, en el Caribe, con destino a Europa, dijo Montesinos, quien no dio más detalles.