El vecino de Castellón que fue detenido en la tarde del viernes por parte de la Guardia Civil de Almassora, acusado de atracar una gasolinera a punta de pistola e intentarlo en otras dos antes de ser arrestado, como ya publicó ayer este periódico, tiene media docena de antecedentes policiales.

El individuo, que responde a las iniciales I. C. V., de 41 años, --que ha sido puesto a disposición judicial-- ya ha sido detenido en otras seis ocasiones anteriormente por delitos contra el patrimonio. Así lo informaron ayer fuentes de la Guardia Civil, que explicaron que la pistola que supuestamente utilizó para perpetrar los atracos en las estaciones de servicio resultó ser una réplica de fogueo.

Los hechos sucedieron sobre las 15.30 horas, cuando la Guardia Civil de Almassora tuvo conocimiento de la comisión de un intento de atraco en una gasolinera situada en el Polígono Mijares. En dicho atraco, un hombre ocultando el rostro con un pañuelo y una gorra había intentado entrar en el interior del establecimiento armado con una pistola, pero no pudo sustraer nada porque la puerta se encontraba cerrada por la empleada.

No obstante, antes de darse por vencido y abandonar la estación de servicio, el hombre, supuestamente, amenazó a la trabajadora de la misma, cogió una piedra de grandes dimensiones y la arrojó contra la puerta de acceso a la gasolinera, pero sin conseguir el objetivo que aquél pretendía, pues al ser blindada, no pudo romperla y acceder al interior para cometer el robo. Y se fue a pie.

EL ARMA, EN LA CABEZA Una vez en el lugar, los agentes recibieron otro aviso en una gasolinera situada en la antigua N-340 cometido por una persona con la misma descripción y que tras encañonar a la empleada poniéndole la pistola en la cabeza consiguió sustraer 120 euros.

Por todo ello, los efectivos de este cuerpo decidieron realizar una batida por la zona y previendo un tercer atraco, se dirigieron hacia la gasolinera que se encuentra situada en la rotonda de matutano, momento en el que localizaron a una persona agazapada entre unos montones de tierra, esperando el momento para poder realizar otro hecho delictivo. Al comprobar que era la persona buscada los agentes de la Guardia Civil procedieron a su detención, siendo identificado como I. C. V., de 41 años y vecino de Castellón.

Tras detenerle, los guardias civiles encontraron en su poder el dinero sustraído y la pistola supuestamente utilizada para llevar a cabo los robos y con la que se le acusa de amenazar a la empleada de una de las gasolineras que finalmente atracó, y que resultó ser de fogueo.