Un niño egipcio de doce años ha muerto como consecuencia de las torturas a las
que fue sometido en una comisaría de la ciudad de Mansura, norte de Egipto,
según denuncian hoy varios medios nacionales independientes. La víctima, Mohamed
Mamduh Abdelrahman, fue detenido hace diez días acusado de robar en una
verdulería en Mansura, a 150 kilómetros al norte de El Cairo.
Según los diarios Al Masry al youm y Al Dustur, los policías le infligieron
descargas eléctricas, le quemaron con cigarrillos y le golpearon con barras de
hierro para arrancarle una confesión. El caso de Mamduh es el segundo de
similares características que sale a la luz en Egipto en las últimas dos
semanas.
A principios de mes un hombre de 36 años de la misma provincia murió cuando
se encontraba bajo custodia policial debido a las palizas recibidas. Numerosas
organizaciones egipcias defensoras de los derechos humanos han condenado estas
prácticas policiales que consideran sistemáticas.
En este segundo caso la fiscalía general decidió detener a los funcionarios
supuestamente responsables de la muerte del detenido.