Vigilaron la vivienda y aguardaron, sin levantar sospechas, a que los dueños abandonaran la casa para poder acceder y robar todos los objetos de valor. En apenas una hora y media lograron apoderarse de 5.000 euros en efectivo, así como de todas las joyas, dos ordenadores portátiles, videocámaras y hasta de una vaporeta para la limpieza.

Los hechos ocurrieron sobre las 12.00 horas del mediodía del viernes, en una villa del camino de La Ratlla, en el término municipal de Almassora. Tal y como explicaba Lucía, dueña de la casa, "hacía días que habíamos visto un hombre con una moto rondando por la zona y este aparcó incluso en la parte de detrás de la vivienda". "También vimos dos furgonetas sospechosas, una blanca ocupada por personas de etnia gitana y otra roja que habían aparcado cerca".

Aún así, Lucía salió de su chalet y cerró la puerta para hacer unas compras. Cuando regresó ya no quedaba nada de valor. "En tan poco tiempo registraron todas las habitaciones, revolvieron los cajones, sacaron las sábanas y abrieron todas las ventanas, imagino que porque uno de ellos vigilaba si volvíamos", narraba la víctima a Mediterráneo.

Los delincuentes podrían formar una banda de unos "cuatro o cinco integrantes", según le dijo la Guardia Civil a Lucía, porque "en poco tiempo lo miraron todo". Y explicó que "rompieron la puerta trasera con un pico y destrozaron el muro. Una vez dentro, en una bolsa de viaje que tenía guardada yo en un armario, metieron los objetos y cuando se percataron de que regresábamos se largaron rápido".

Lucía destacó que la Guardia Civil no suele vigilar la zona y que hace meses les robaron toda la leña y una cementera. "Yo sospecho de los temporeros que vienen a recoger naranjas", dijo.