El juzgado de lo Penal número 2 de Castellón ha condenado a un conductor, Francisco Javier R.G, natural de Benicarló y de 31 años, a una pena de cuatro meses y medio de prisión por circular ebrio y ser reincidente, ya que fue juzgado en dos ocasiones anteriores por lo mismo.

Los hechos sucedieron en el kilómetro 2 de la CV-149, que discurre entre Castellón y Benicàssim, cuando los agentes de la Guardia Civil pararon el vehículo con el que circulaban en un control de alcoholemia. Los efectivos, según la sentencia, se cercionaron enseguida de que el hombre presentaba un estado de embriaguez por "falta de coordinación" y "respuestas embrolladas". Al hacerle la prueba dio un resultado de 0,98 milígramos de alcohol por litro de aire expirado.