La Guardia Civil se ha incautado de más de 3.000 kilos de hachís localizados en el interior de una embarcación intervenida en el puerto de Vinaròs, tras una intervención que tuvo su desenlace el jueves pasado a las 23.00 horas.
A esa hora, las patrullas de la Guardia Civil aguardaban en el muelle a la espera del atraque de un barco de alquiler de nombre Nou Tot Sol, después de haber descubierto el intercambio que se había producido en alta mar con una embarcación fuera borda.
Según testigos consultados, en cuanto llegaron a puerto, los agentes identificaron y detuvieron de inmediato a los cuatro tripulantes, mientras que otros dos se lanzaban al agua tras tirar varios fardos al mar. Tras una intensa búsqueda en plena oscuridad, uno de ellos pudo ser atrapado en un vial contiguo a la lonja.
Al parecer, los agentes de la benemérita buscaron al segundo individuo fugado por todo el recinto portuario con linternas, incluso dentro de las embarcaciones atracadas sin, en principio, y según los testigos, poder dar con él.
Las mismas fuentes detallan que a los detenidos los esperaba un vehículo con el que, supuestamente, transportarían la droga para su posterior distribución.
Barco precintado
Desde la noche del jueves, el barco está precintado en el puerto vinarocense, cerca del Club Náutico, en la parte sur de la lonja de pescado.
Ayer, sobre las 8.00 horas, una embarcación de la Guardia Civil acudió a la zona para continuar con una investigación que está en marcha, como confirmaron desde el instituto armado.
El pasado mes de mayo ya se incautaron otras 2,5 toneladas de hachís almacenadas en 65 fardos en otra embarcación localizada en la localidad. En este caso, la actuación policial se saldó con la detención de dos personas por un delito de tráfico de drogas.
