Un grupo armado con bates y barras de hierro, tras la agresión del sábado en Castellón

A falta de confirmación oficial, testigos de los hechos sucedidos en la noche del sábado 2 de marzo en Castelló apuntan a una agresión con motivaciones políticas e ideológicas. De acuerdo con el relato de personas que en ese momento se encontraban por la zona donde se produjo el altercado, poco antes de las 23.30 horas se pudo ver a un grupo de gente armada con bates de béisbol y barras de hierro por el entorno de la calle Nueve de Marzo, donde se encontró a una víctima. Minutos después, Emergencias activó la alerta porque se notificó que había una persona herida —al menos que se sepa—, un hombre de 32 años que tuvo que ser ingresado en la UCI del Hospital General.

El objetivo del mencionado grupo, según las informaciones a las que ha tenido acceso este periódico, era la fiesta organizada en su sede por un conocido colectivo castellonense que se identifica como antifascista, La Cosa Nostra Castelló Antifa Social Club, en la calle San Miguel. La propia entidad ha publicado un comunicado en sus redes sociales en el que, con varias fotografías del evento del sábado, afirman: «Gracias y mucho amor a las que se juegan su libertad e incluso el cuerpo para no ceder y confrontar a la reacción que intentó con todas sus fuerzas represivas y sus matones detener un Castelló crítico, solidario y antifascistas, cosa que nunca conseguirán».

En la misma publicación, el colectivo realiza una acusación directa dirigida a un concejal del Ayuntamiento de Castelló, al afirmar que «señalamos al incendiario concejal de extrema derecha Ortolá como máximo responsable de todos los incidentes sucedidos».

Investigación en curso

A pesar de haber realizado las consultas pertinentes, hasta el momento sigue sin haber información oficial de los hechos y son los mismos testigos los que comentan a Mediterráneo que podría haber algún herido más del que, por el momento, no hay constancia.

Las mismas fuentes indican que en cuanto vieron pasar al grupo armado, informaron al 112, «era evidente que no tramaban nada bueno». De hecho, como ya adelantó este periódico, la carta de emergencias llegó a la Policía Local a las 23.30 horas. Entonces ya se sabía que había una persona herida de gravedad. Informaciones hospitalarias indican que sigue en la UCI sin cambios en su evolución. El pronóstico es reservado.

La investigación del suceso está en manos de la Policía Nacional.