Astronomía

El telescopio Webb retrata como nunca antes el nacimiento de estrellas similares al Sol

Celebrando su primer año de funcionamiento, Webb obtuvo una fantástica imagen que aporta detalles nunca vistos del “alumbramiento” estelar

Webb muestra el nacimiento de una estrella como nunca antes se había visto, en Rho Ophiuchi.

Webb muestra el nacimiento de una estrella como nunca antes se había visto, en Rho Ophiuchi. / Créditos: NASA, ESA, CSA, STScI, Klaus Pontoppidan (STScI), Alyssa Pagan (STScI).

Pablo Javier Piacente

Para conmemorar su primer año de operaciones, el JWST ha dirigido su ojo hacia el complejo de nubes Rho Ophiuchi, ubicado a unos 390 años luz de distancia de la Tierra, observando a través de una gruesa capa de polvo cósmico la brillante formación de estrellas que se produce en ese sitio. Se trata de "estrellas bebé" en gestación: nuestro propio Sol experimentó una fase similar hace mucho tiempo, pero ahora tenemos la tecnología para ver el comienzo de la historia de otra estrella semejante.

El Telescopio Espacial James Webb (JWST) de la NASA ha culminado su exitoso primer año de funcionamiento con una vista detallada de la región de formación estelar más cercana a la Tierra, el complejo de nubes Rho Ophiuchi. El resultado es una imagen dinámica que da cuenta del proceso de formación de estrellas con características similares al Sol, aportando detalles que los astrónomos nunca habían podido apreciar hasta hoy.

Estrellas naciendo

Según una nota de prensa, la imagen de Webb muestra una región que contiene aproximadamente 50 estrellas jóvenes, todas ellas de masa similar al Sol, o incluso más pequeñas. Las áreas más oscuras son las más densas, donde el espeso polvo cósmico envuelve a las protoestrellas en formación. 

Pueden observarse gigantescos chorros bipolares de hidrógeno molecular, representados en rojo, que aparecen horizontalmente en la parte superior de la imagen y verticalmente sobre la derecha. Estos chorros se producen cuando una estrella estalla por primera vez y se “libera” de su envoltura primigenia de polvo cósmico, lanzando emisiones al espacio para dar cuenta de su nacimiento, como si se trataran de los primeros llantos de un bebé. 

Marcando un fuerte contraste, la estrella S1, la única en la región con una masa superior al Sol, se muestra envuelta por una capa de polvo brillante sobre la parte inferior de la imagen. Sus compañeras son todas semejantes al Sol en cuanto a su masa, y además pueden observarse las sombras reveladoras de los discos protoplanetarios que cobijan: esto significa que estamos apreciando sistemas planetarios en formación potencialmente similares al Sistema Solar, en sus primeras etapas de desarrollo.

“La imagen de Webb de Rho Ophiuchi nos permite presenciar un período muy breve en el ciclo de vida estelar con una claridad inusitada. Nuestro propio Sol experimentó una fase como esta, hace mucho tiempo, y ahora tenemos la posibilidad de observar el comienzo de la historia de otra estrella”, dijo en el comunicado citado previamente Klaus Pontoppidan, científico del proyecto Webb en el Instituto de Ciencias del Telescopio Espacial en Baltimore, Estados Unidos. 

Video: recorrido por el área de Rho Ophiuchi, donde Webb obtuvo la imagen del nacimiento de una estrella similar al Sol. Créditos: HubbleWebbESA / YouTube.

El inicio de una “revolución” en el conocimiento astronómico

Esta impresionante imagen de un nacimiento estelar a alrededor de 390 años luz de distancia de la Tierra aporta un interesante conjunto de datos a los científicos, que buscan dilucidar los detalles del proceso de formación de estrellas y sistemas planetarios. Es solo una muestra de todo aquello que ha conseguido en un año de trabajo el telescopio espacial más avanzado construido por el ser humano hasta hoy, y que promete seguir asombrándonos de aquí en más.

“En tan solo un año de operaciones, el Telescopio Espacial James Webb ha transformado la visión del cosmos de la humanidad, mirando a través de las nubes de polvo y viendo la luz de los rincones más lejanos del Universo por primera vez. Cada nueva imagen es un nuevo descubrimiento, que permite a los científicos de todo el mundo hacer y responder preguntas que antes ni siquiera podían soñar”, concluyó el administrador de la NASA, Bill Nelson.

Vale recordar que el telescopio Webb es un observatorio espacial desarrollado a través de la colaboración de 14 países, construido y operado conjuntamente por la Agencia Espacial Europea (ESA), la Agencia Espacial Canadiense y la NASA. Fue lanzado el 25 de diciembre de 2021, pero sus primeras imágenes se dieron a conocer el 12 de julio de 2022.

Ubicado a 1,5 millones de kilómetros de la Tierra, en el denominado segundo punto de Lagrange (L2), desde el cual puede obtener una visión más clara de las regiones del cosmos que busca analizar, ha permitido importantes avances en el estudio del Universo primitivo, la existencia y composición de los exoplanetas, el ciclo de vida estelar y la formación de las galaxias