Tecnología y sociedad

Los drones policiales se implantan en Estados Unidos

Inspeccionan edificios, documentan escenas de crímenes y accidentes, y buscan personas sospechosas o desaparecidas

Seguimiento de drones en el departamento de policía de Chula Vista

Seguimiento de drones en el departamento de policía de Chula Vista / Chula Vista Police Department.

Redacción T21

Chula Vista, un suburbio de San Diego, California, con una población de 275.000 habitantes, es una de las pocas ciudades estadounidenses que utiliza sistemáticamente drones para ayudar a la policía en caso de emergencia. En activo desde 2018, el sistema está sirviendo de referencia a otros Estados y tal vez otros países.

Chula Vista, una ciudad de California, es pionera en el uso de drones policiales para atender las llamadas de emergencia y mejorar la seguridad pública. Su programa de drones, que opera las 24 horas del día, los siete días de la semana, desde cuatro sitios de lanzamiento, ha demostrado ser una herramienta eficaz y eficiente para proporcionar información crítica a los agentes en el terreno, reducir los tiempos de respuesta y aumentar la calidad de vida de los ciudadanos, según la presentación oficial.

Permite evaluar la gravedad de los accidentes de tráfico, confirmar violencia en la vía pública o rastrear a un sospechoso inadvertidamente, antes de que lleguen los primeros coches patrulla.

Según estadísticas oficiales de la ciudad, la mayoría de los incidentes a los que responden los drones son lo que él llama “crímenes de pobreza”, incluidos “disturbios personales” (26%), violencia doméstica y colisiones de tráfico; aproximadamente el 12% fueron etiquetados como “evaluación psicológica”.

¿Qué son los drones policiales?

Los drones policiales son sistemas aéreos no tripulados (UAS, por sus siglas en inglés) que pueden volar de forma remota y llevar cámaras y otros sensores. Los drones policiales se utilizan para diversos fines, como proporcionar una vista aérea de una zona o incidente, inspeccionar el interior de edificios, documentar escenas de crímenes y accidentes, y buscar personas perdidas o desaparecidas.

Los drones policiales no son una novedad. Más de 1.500 departamentos de policía en Estados Unidos los utilizan, sobre todo para operaciones de búsqueda y rescate. Sin embargo, su uso está limitado, en la mayoría de los casos, por la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), que exige que los departamentos de policía vuelen los drones solo dentro de la línea de visión de los operadores.

Ejemplo de un dron de la policía de Chula Vista interviniendo en una disputa doméstica en la que un coche acosa a un motorista. Chula Vista Police Department.

¿Cómo funcionan?

Los drones se despliegan desde el techo de la sede del departamento de policía a las llamadas de emergencia y otros informes de incidentes, como delitos en curso, incendios, accidentes de tráfico e informes de sujetos peligrosos.

Los drones son controlados por pilotos que escuchan las llamadas al 911 en directo y que a menudo llegan primero a las escenas, cámaras en mano. Transmiten imágenes en tiempo real a los pilotos, que las comparten con los agentes en el terreno, proporcionándoles una conciencia situacional mejorada y una toma de decisiones más informada.

Los drones también pueden comunicarse con los ciudadanos a través de altavoces, dando instrucciones o solicitando información. Pueden volar entre 60 y 120 metros de altura, sin ser detectados por la mayoría de las personas.

Los drones no se utilizan para vigilancia general, sino solo para situaciones específicas y autorizadas. El departamento de policía respeta las libertades civiles y la privacidad personal de los ciudadanos y tiene una política y una supervisión estrictas sobre el uso de los drones.

Activos desde 2018

El programa de drones de Chula Vista, implementado en 2018, es uno de los primeros y más avanzados del país. Fue el primer departamento de policía en obtener una exención de la FAA para volar los drones más allá de la línea de visión (BVLOS, por sus siglas en inglés), lo que abre la posibilidad de realizar vuelos más largos, operaciones remotas y flotas más amplias y eficientes.

El programa de drones de Chula Vista se basa en una asociación entre el departamento de policía y CAPE, una empresa de tecnología que proporciona una plataforma de software para controlar los drones de forma remota y segura.

Ambos formaron parte del equipo de San Diego seleccionado como uno de los 10 equipos entre cientos de solicitantes como parte del Proyecto Piloto de Integración (IPP, por sus siglas en inglés) de la FAA, una iniciativa federal diseñada para ayudar a integrar los drones en el espacio aéreo nacional.

Perspectivas de futuro

El programa de drones de Chula Vista ha inspirado a otros departamentos de policía a seguir sus pasos y a adoptar programas similares o incluso más ambiciosos. Se espera que la FAA legalice completamente el vuelo BVLOS en los próximos años, lo que facilitaría el lanzamiento de otros programas de este tipo.

El futuro de los drones policiales es prometedor, pero también plantea nuevos retos y dilemas, como el difícil equilibrio entre el aprovechamiento de las ventajas de esta tecnología y el respeto de los principios éticos y legales de la sociedad.