Cómo limpiar las persianas por fuera (sin poner en peligro tu vida)

Al estar expuestas al exterior son muy propensas a ensuciarse

Víctor Meseguer

Las persianas son imprescindibles en los hogares españoles. Tanto o incluso más que las cortinas. Tan es así que muchos españoles las echan de menos cuando viajan al extranjero a países que no acostumbran a poner persianas.

No todo el mundo tiene persianas, porque es un elemento muy poco común en otros países del mundo, pero si todos las tiene en nuestro país. Y con ellas hay un problema y es nada más y nada menos que limpiarlas, ya que su posición hace que la limpieza de estas sea incómoda, y además al estar expuestas al exterior son muy propensas a ensuciarse.

¿Cómo se limpian?

Te contamos los pasos que tienes que seguir para que se queden perfectamente limpias tanto en su interior como en su exterior.

1. Pasar el aspirador con el accesorio del cepillo para retirar el polvo acumulado.

2. Llenar un cubo con agua, un chorrito de amoníaco y detergente líquido para vajillas.

3. Bajar la persiana y limpiar la parte interior.

4. Empezar a limpiar la parte exterior sin moverte del sitio. Desatornillando o desmontando el cajetín para tener acceso a la parte enrollada.

5. Ir limpiando la parte enrollada subiendo la persiana poco a poco, esa parte es la que corresponde a fuera.

6. Cuando llegues al final la persiana estará limpia, solo quedarán dos palmos que puedes limpiar con cuidado sacando el brazo.

¿Hay diferencia dependiendo del material?

Las persianas pueden ser de diferentes materiales que pueden limpiarse con agua limpia y un poquito de jabón neutro o detergente líquido lavavajillas. También resulta muy útil el uso de vaporeta.

  • Persianas de madera. La limpieza dependerá del tipo de madera y el desgaste de las lamas. Se aconseja aplicarles un barniz de exterior para mejorar su estado. También puedes aplicar un producto específico para parqué.
  • Persianas fijas de madera. Son preciosas pero poco prácticas. Quítales primero el polvo y luego humedece un cepillo doble con producto para madera que irás pasando por las distintas lamas.
  • Persianas de aluminio. Tienen mayor durabilidad, son más resistentes, estéticas y modernas pero debes mantenerlas limpias. Puedes hacerlo con una esponja y un producto limpiador. Aclara con otra esponja y seca a conciencia.
  • Persianas de plástico o PVC. El paso del tiempo y la acción del sol hacen que se vuelvan más porosas y la suciedad penetre más.