Son las 3:00 de la madrugada cuando una vivienda comienza a arder. En el interior se encuentran tres adultos y siete niños, y cuando intentan salir por la puerta las llamas han avanzado demasiado y se refugian en el balcón, desde donde los bomberos, in extremis, consiguen rescatarles. Fátima, de origen magrebí y con algunas dificultades para hablar en español, apunta a su expareja, el presunto autor del incendio y que ya se encuentra en busca y captura por la policía. Fátima sospecha que su exmarido podría haber incendiado el edificio con una bombona de butano. Algunos testigos escucharon gritos en la vivienda esa misma noche y aseguran que el exmarido de Fátima tiene problemas con el alcohol. Todo podría haber terminado en tragedia pero, por suerte, no hay que lamentar heridos y la policía espera atrapar al sospechoso en las próximas horas.