Aunque no se ha presentado oficialmente la candidatura del Partido Popular para las próximas elecciones, según decía el amigo Ángel Sáez, en la edición de este periódico del sábado, Juanjo Rubert, que ya fue concejal por esta misma formación política, ha sido repescado y formará parte de la candidatura popular. Enhorabuena a Juanjo por su vuelta a la vida política y de servicio a nuestro pueblo, y enhorabuena a Manuel Vilanova, alcalde, por tan destacado fichaje.

Pero en la misma noticia se indica también, que más allá de que Juanjo vuelve a la política, uno de los motivos es que sea el delfín, el sucesor del actual alcalde. O sea, que está ya predestinado, si no para ser alcalde, porque eso depende del resultado de las elecciones, sí para ser candidato en las elecciones del año 2007. Cuando leí lo citado, me vino a la mente aquella frase con resonancia medieval, cuán largo me lo fiais..., porque vender la piel del oso antes de cazarlo es una temeridad.

Está muy bien que se tenga previsión en todo, especialmente en las cosas importantes, y el número uno de una candidatura de un partido que ha ganado las elecciones en varias ocasiones, de suyo, es algo muy importante. Pero a mi entender, esas cosas se han de hacer en silencio, sin hacerlo saltar como noticia y mucho menos a tan largo plazo. El hacerlo como se ha hecho, si el partido en el poder repite y vuelve a detectar el mando, ese ser el delfín y que todos lo sepan, puede actuar de forma negativa para el amigo Juanjo. La envidia es mala consejera y alguno de sus propios compañeros puede albergar este sentimiento negativo y la oposición puede usar el tema como muletilla. En fin, lo dicho, dicho está. Enhorabuena a Juanjo y que el éxito le acompañe.