Los controles realizados por la Universitat Jaume I en la Pla§a Major durante algo más de un mes, mediante la unidad móvil que recorrerá a lo largo del año distintos puntos de la ciudad, ha desvelado que la contaminación registrada en el centro urbano está por debajo de los niveles máximos de referencia que marca la Unión Europea.

Así, se supera en dos veces el nivel de referencia de 55 microgramos de partículas PM-10, cuando la Unión Europea marca un límite de 35 veces este valor. Respecto a las partículas en suspensión, se registraron 46 microgramos por metro cúbico, cuando es 150 el máximo permitido.