La Iglesia villarrealense se ha alzado en conjunto contra la actuación de una de las peñas que participaron en la cabalgata de fiestas del domingo. Y es que, a lo largo del desfile festivo, la peña El Bequelló, cuyos miembros se disfrazaron de monjas, cardenales y de Papa, "hacían mofa y escarnio de nuestra fe católica", según dice la nota a la que se adhieren los 12 sacerdotes de las parroquias locales.

"El espectáculo se atrevió con lo inimaginable: sobre una carroza, con uno vestido de Papa, sentado en su sillón, al pasar por delante de la sede de Lluïsos, ante la antigua capilla de la Sangre, y de la tribuna de autoridades, realizó gestos y posturas obscenas, escenificando una felación por debajo de sus hábitos y una sodomización. La aberración fue contemplada por todos los asistentes, incluso los niños, lo que agrava el escándalo, y emitida por las televisiones locales", añaden.

Los curas villarrealenses consideran "indignante y profundamente inmoral que, desde los poderes públicos que nos representan, se tolere este atentado contra la dignidad humana y las creencias religiosas de la comunidad católica. La fiesta y la diversión, y más cuando se celebran con motivo de la festividad de nuestro patrón, Sant Pasqual, no pueden ser excusa para el insulto y la ordinariez".

ACCIONES Los sacerdotes no descartan emprender acciones legales por estos hechos "contra los responsables", y solicitan "de quien corresponda, excusas públicas a los católicos que se hayan podido sentir ofendidos, así como que se tomen las medidas oportunas para que hechos tan lamentables y faltos de toda honestidad y cultura, como el sucedido durante la cabalgata, no se repitan, en aras a la convivencia pacífica de nuestro pueblo y del justo respeto a todos los credos religiosos".

Por su parte, el concejal de Fiestas, Ignasi Clausell, indicó ayer ante las protestas de los responsables parroquiales, que la Junta de Festes será la que decidirá en los próximos días si emite un comunicado al respecto.

En este sentido, el concejal Clausell reconoció que existe cierto malestar entre los vecinos por lo ocurrido y apeló a la responsabilidad de quienes participan en la cabalgata para que no se repitan este tipo de actitudes.

El edil indicó que "también se ha hablado con responsables de la Comissió de Penyes para trasladarles el malestar existente y se estudiará que hacer para evitar estas conductas".