El portavoz del grupo municipal socialista de Vila-real, José Benlloch, pedirá al alcalde, Juan José Rubert, que priorice, “por delante de todas las inversiones, el pago de más de 800.000 euros en facturas del 2009 que aún se debe a diversos proveedores”. “El Ayuntamiento, en lugar de ser una entidad que ayuda a las empresas locales en estos momentos de dificultad, se ha convertido en un problema para las firmas que trabajan para la Administración, ya que mantiene una gran deuda con ellas”, indicó el concejal.

Benlloch aseguró que “gracias a una propuesta nuestra y a la presión que ejercimos en cuanto conocimos el asunto, el consistorio rebajó el mes pasado su débito, que alcanzaba los 3,5 millones de euros”. Además, aseveró que “esto es vergonzoso, mientras el primer edil se hace fotos, muchas de ellas gracias al plan E que ha impulsado el Gobierno central, aquí hay firmas que han hecho sus trabajos y que no cobran”.

Asimismo, el líder de los socialistas anunció que su agrupación va a solicitar la lista de las mercantiles que han trabajado en lo que ha transcurrido del 2010 “y tampoco han sido recompensadas, porque nos tememos que la pelota se esté haciendo demasiado grande y la situación económica del Ayuntamiento sea de extrema gravedad, pese a que se siguen malgastando fondos”. H