Estudio de viabilidad del proyecto elaborado a instancias del Ayuntamiento
Soterrar la vía del tren en Vila-real requerirá expropiar suelo por valor de casi 850.000 €
El informe encargado por el consistorio estima que necesitarían ocupar 98.680 metros cuadrados
El informe elaborado por la empresa Ingestec, a instancias del Ayuntamiento de Vila-real, para determinar la viabilidad del soterramiento de la vía del tren a su paso por la ciudad, calcula en 98.680 metros cuadrados la superficie a expropiar, definitiva o temporalmente, para poder acometer un proyecto que, como avanzó Mediterráneo el pasado 21 de marzo, supondría una inversión de 227 millones de euros en total.
Las posibles expropiaciones tendrían un coste que se elevaría a 849.700 euros. En concreto, algo más de 691.000, corresponderían a la ocupación de suelo no urbanizable, y el resto se distribuiría en afecciones a edificaciones y espacio urbanizable, así como a servidumbres y reservas temporales.
El documento en cuestión establece el trazado de la línea soterrada por el centro del antiguo PAI Solades, entre la vía existente ahora y la carretera N-340. Hay que recordar que el programa urbanístico en cuestión caducó en el 2014, al haber transcurrido 13 años de inacción de los trámites necesarios para su desarrollo.
El estudio fija en cerca de 3,9 kilómetros la afección del proyecto en su totalidad, que incluye un túnel de 2,5 kilómetros, a una profundidad máxima de 25,9 metros y una pendiente máxima del 15%. Además, se incluye la construcción de una nueva estación, en este caso intermodal porque permitiría el trasvase de pasajeros del tren y por carretera, de 1.000 metros cuadrados (incluidos otros servicios anexos), a una distancia de 270 metros de la actual y a 800 metros del Hospital de la Plana. Contaría con un andén a 20 metros de profundidad y con una longitud de 100 metros.
Entrada y salida
El túnel que se propone tendría sus entradas --y a su vez salidas-- en torno al polígono empresarial de Reg Nou, en la salida norte de la ciudad y a poco más de 200 metros del cauce del río Millars, así como en la zona sur, en las proximidades de la futura estación ferroviaria de mercancías cerámicas (puerto seco) que impulsa Pamesa en los terrenos del antiguo proyecto de Espai Vila-real, frente a Porcelanosa y entre la N-340 y la actual vía.
El ejecutivo vila-realense liderado por el alcalde, José Benlloch, decidió solicitar un estudio de detalle para reclamar al Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana el soterramiento de la vía del tren a su paso por el este del casco urbano. Un soterramiento que contó, en agosto del 2022, con el apoyo plenario de todos los grupos políticos del consistorio.
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