Vila-real impulsa una movilidad más ecológica en la Policía Local

Cambiar la práctica totalidad de la flota de coches patrulla y furgones de la Policía Local de Vila-real por vehículos híbridos es el principal objetivo del último proceso de licitación lanzado por el Ayuntamiento para impulsar la movilidad sostenible en el cuerpo de seguridad municipal.

De esta forma, tras la renovación el pasado año de cinco de los anteriores vehículos por otros con menor impacto medioambiental, el consistorio apuesta por una segunda tanda para sustituir casi todo el parque móvil de la Policía Local con coches híbridos, el suministro de los cuales se realizará mediante un contrato de renting con opción a compra para un periodo de cuatro años y un presupuesto tal de 465.511 euros.

Como explican a Mediterráneo fuentes policiales, el objetivo a medio plazo es que en torno al 80% de la flota policial sea sostenible, con una quinta parte de los vehículos eléctricos y el resto híbridos e híbridos enchufables.

La licitación se lleva a cabo en estos momentos, cuando está próximo el vencimiento del actual contrato. El concurso, que consta de cinco lotes, tiene como fin sustituir seis de los vehículos que todavía utilizan exclusivamente combustibles fósiles, de manera que se contratarán tres SUV híbridos --dos de patrulla y una camuflado-- y otro coche patrulla totalmente eléctrico. Además, se adquirirán una furgoneta para Protección Civil y un furgón para atestados. En este último caso será de gasoil, por cuestiones operativas y teniendo en cuenta la funcionalidad de este operativo.

Equipamiento

La concejala de Seguridad Ciudadana, Silvia Gómez, hace hincapié en la voluntad del consistorio de «dotar a la Policía Local y al servicio de Protección Civil de un equipamiento más moderno y respetuoso con el medio ambiente pero que, al mismo tiempo, asegura una rápida respuesta de los agentes en situaciones de emergencia».

La Policía Local cuenta en la actualidad con una flota integrada por cuatro scooters, seis motocicletas, dos furgones (uno del servicio de atestados y otro de la Unidad de Respuesta Policial), así como 11 coches --entre los de patrulla y los de vigilancia rural, que son tipo todo terreno--, de los que ahora mismo cinco son híbridos y seis funcionan aún a gasoil.

Asimismo, también se apuesta a corto plazo por introducir motos eléctricas. De esta forma, en un primer momento y a modo de prueba, se plantea la adquisición de dos de estos vehículos con destino a Protección Civil.

Como apuntan desde el cuerpo policial, con la tecnología actual y para garantizar el servicio, todavía es imposible que el 100% de la flota sea totalmente eléctrica.