Nuevo desembarco de restaurantes de ‘fast food’ en Vila-real

El desembarco de franquicias de comida rápida en Vila-real adquiere un ritmo imparable. Y es que, como ya avanzó Mediterráneo el pasado mes de enero, la cadena de establecimientos especializados en pollo frito Popeyes, competencia directa de KFC -que abrió recientemente restaurante en la ciudad- se había interesado en instalar uno de sus locales en uno de los puntos neurálgicos del municipio, en la zona sur, frente al hipermercado Carrefour.

Ahora, la cadena en cuestión ya tiene la licencia municipal que le permite iniciar las obras, en una parcela ahora sin construir entre el KFC y el también recientemente inaugurado supermercado Aldi. Y no solo eso, sino que también se ha concedido autorización para la instalación de un Burger King junto a Popeyes. En este último caso, cabe pensar que la franquicia se trasladará de su ubicación actual, dentro de Carrefour, hasta su nuevo emplazamiento, fuera de la superficie comercial.

Asimismo, este periódico ha podido saber que se ultima la documentación para conceder otras dos licencias de obras para dos establecimientos más de fast food. En concreto, se trata de un segundo Burger King, que se ubicará en la entrada norte, en parte del actual recinto de la Cooperativa Católico Agraria; y un Taco Bell, una franquicia de comida mejicana que se abrirá en un local existente en la esquina de las avenidas França y Cedre, junto al establecimiento The Fitzgerald, que abrió sus puertas en Vila-real hace un año.

Valoración

Preguntado por este boom de franquicias en la ciudad, no solo gastronómicas sino también de alimentación y otros productos -Aldi, Lidl o Action, entre los más recientes-, el concejal de Territorio, Emilio Obiol mantiene que «no llegan aquí por casualidad, porque buena parte de estos negocios se instalan en las entradas y salidas del municipio que este gobierno local ha mejorado en los últimos ocho años, a través de las subvenciones concedidas porel Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (Ivace)».

El edil Obiol hace hincapié en que «los inversores fundamentan su decisión en el dinamismo de Vila-real y en la existencia de unas infraestructuras prácticas y modernas, por lo que ha sido decisiva la apuesta de este ejecutivo por los accesos a la localidad, tanto por el norte como por el sur». En este sentido, el máximo responsable del área de Territorio incide en la diversificación de la economía local y que «convierte a Vila-real en una ciudad de servicios, además de industrial, además de la capital del sur de la provincia, desde el Millars a Sagunt». A todo ello se suma la creación de empleo que supone la llegada de este tipo de establecimientos. Todo indica que la intención de las nuevas franquicias es abrir a finales de año o en las primeras semanas del próximo año 2024.