La Conselleria de Bienestar Social aseguró ayer que “priorizará a los colectivos de personas con discapacidad en cuanto la Generalitat reciba el segundo pago del Fondo de Liquidez Autonómica (FLA)”, en referencia al SOS que lanzaron el martes en Mediterráneo 12 entidades de discapacitados, agrupadas en la coordinadora Cermi Castellón, para cobrar los “más de 3 millones de euros” que les adeuda el Consell este año, para atender a sus 2.350 usuarios. Fuentes de la cartera social del Consell señalaron que “las asociaciones han cobrado ya un 60% de las subvenciones previstas” y que “la situación, actualmente, es complicada y se va a solucionar solo haya liquidez”.

Bienestar Social es consciente de los 12 casos del colectivo, que suman unos 500 trabajadores, pero está “a la espera de recibir nuevos fondos para aliviar la situación de estos y otros colectivos de personas con discapacidad, y la dependencia, que hoy por hoy, son prioritarios”, matizaron.

Afanías Castellón y la Vall, Aspas y Personas Sordas, Ateneu de Daño Cerebral Sobrevenido, Fundación Síndrome de Down, Cocemfe Maestrat, Frater Castelló, Afdem, Asociación de Esclerosis Múltiple de Castellón, Fundación Aspropace y ONCE han lanzado una campaña, ¿Somos capaces?, con un vídeo en Youtube en el que dice ¡Por favor! Tírame al contenedor, al Estado no le importa, con más de 3.000 visitas.

Conselleria da datos autonómicos y asegura que “se ha hecho un esfuerzo en este año difícil por atender las necesidades de los colectivos, y se ha multiplicado el esfuerzo asistencial”. Explican que, en el último mes, Bienestar Social ha abonado 19,7 millones de euros de su deuda de este año y que “se ha triplicado la inversión”. “Había 96 centros en el 1995; en el 2012 hay 381 en toda la Comunitat”, señalan.

MODELO DE FINANCIACIÓN // La Conselleria, además, está ultimando un nuevo modelo de financiación a las entidades sociales que atienden a personas con discapacidad, en el que, según explican desde Bienestar Social, “se priorizará a las personas y servicios que reciben, no a las entidades”. Una fórmula en la que “ya se trabaja”, pero que aún no tiene fecha para ponerse en marcha oficialmente. H