Puede decirse que José Flich Clofent (25 de mayo del 1976, Nules) tiene un espacio reservado en el podio de cualquier carrera que se celebra en Nules. El corredor del Club d’Atletisme Noulas se coronó en el 2017 como ganador del V Circuit de Carreres Populars de Nules y el pasado abril se estrenó en el I Duatló Sprint de Nules, donde fue segundo local.

—¿Cómo empezó a correr?

—Siempre me ha gustado hacer deporte. Jugué a fútbol en el CF Nules hasta los 18 años y después practiqué fútbol sala tres años. A los 21 empecé a competir en ciclismo, una afición que he heredado de mi padre, José, y que exploté con carreras sociales y marchas cicloturistas como la Sierra de Gudar, la Quebrantahuesos o la Pujada al Desert, hasta los 26 años. Luego lo dejé, y aunque ya llevaba un tiempo corriendo, no fue hasta el 2008 cuando participé en una carrera, la Volta a Peu de la playa de Nules.

—¿Qué tipo de pruebas corre?

—Me encanta correr en casa, así que si hay que sacrificar alguna carrera, siempre serán las de otras poblaciones. Empecé haciendo cincomiles y diezmiles, hasta que en el 2011 hice la Mitja de Castelló. Hasta entonces no hubiera imaginado que sería capaz de correr tantos kilómetros.

—¿Cómo pasó al maratón?

—La Mitja me salió tan bien, la acabé en 1.28 horas, que a los dos días ya quería hacer el Maratón de Castellón, y eso que me parecía una locura. Hablé con mi amigo Vicente Miralles y me dijo que con el fondo que yo tenía del ciclismo no debería de tener problemas, así que al final salí a acabarla y la hice en 3.19 horas. Aquella fue la segunda edición del Maratón de Castellón y desde entonces llevo siete seguidos. Yo soy de hacer un solo maratón al año, y este es prioritario.

—¿Por qué esa predilección por el Marató BP Castelló?

—Lo tenemos al lado de casa y me gustan las fechas. Los corredores populares no luchamos por la victoria pero le damos valor a la carrera con nuestra presencia, cuantos más, mejor. Así que prefiero poner mi grano de arena para hacer más grande nuestro maratón.

—¿Qué ha supuesto ganar por primera vez el Circuit de Carreres Populars de Nules?

—El objetivo que me había marcado era subir al podio y al final pude ser primero, lo que está muy bien. Pero hay que decir que si lo he logrado es porque los auténticos cracks del running en Nules, gente que está uno o dos escalones por encima de mí, como Oliver, Vicente Martínez o Juanvi Mechó, no corrieron todas las pruebas, y eso facilitó las cosas.

—¿Desde cuándo forma parte del CA Noulas?

—Desde el 2011. Ya conocía a algunos compañeros y ahora somos una piña en las carreras.

—¿Qué carreras recuerda de una manera especial?

—Cada prueba tiene algo que la hace única y siempre lo doy todo hasta que cruzo la línea de meta, así que si alguien me gana es porque corre más. Pero si tengo que elegir una carrera me quedo con el Maratón de Castellón del 2014, en el que hice mi mejor marca, 2.58.36. Fue la primera vez que bajé de tres horas, con la gran ayuda de David Rubio, sobre todo en los últimos kilómetros. También fue el primer maratón después del fallecimiento de mi madre, Teresa, así que rompí a llorar al cruzar la meta. Otro Maratón de Castellón muy emotivo fue el del 2017, en el que crucé la meta con mi hijo, Toni, que acababa de nacer.

—¿Cómo planifica la temporada?

—Antes hacía ciclismo de Navidad a agosto y luego corría, pero desde que nació mi hijo tengo menos tiempo para la bici. Ese fue uno de los motivos para volver a hacer el circuito de Nules, así que mi hijo tiene parte de culpa de que lo haya ganado.

—¿Por qué probó con el duatlón?

—En este deporte están las dos disciplinas que me apasionan, pero sobre todo me ilusionaba hacer un duatlón en Nules. Así que cuando supe que iban a organizarlo participé en el de Almassora para prepararlo y disfruté como un enano. Tenía muchas ganas de hacer un duatlón en Nules, y encima fui segundo local.