El Consorcio Provincial de Bomberos de la Diputación de Castellón ha limpiado los márgenes y adecuado un total de 470 kilómetros de pistas forestales de 21 municipios en lo que llevamos de año. Igualmente, ha limpiado e inventariado las balsas contra incendios de la provincia y, de modo específico, en las zonas habitadas de montaña de los municipios de Benicàssim y Alcossebre, conocidas como de interfaz urbano-forestal. Desde el Consorcio informaron ayer que se trata de las principales líneas de trabajo que definen la labor preventiva que realiza un dispositivo de 200 personas de la organización, las dedicadas a la prevención de incendios forestales.

El diputado de Bomberos, Luis Rubio, señaló ayer en este sentido que “trabajamos durante todo el año para prevenir al máximo el efecto que puede provocar el fuego en nuestro rico patrimonio forestal”. Estos trabajos se coordinan con los que realiza el área del parque móvil en el Plan de Rehabilitación de Caminos, con lo que “llegamos a cubrir el mantenimiento y mejora de pistas y caminos de todos los municipios”, puso de manifiesto Rubio.

En caminos y pistas, las tareas revierten en un doble objetivo: facilitar los accesos a los incendios de los medios de extinción, y evitar la propagación del fuego desde los márgenes de las pistas. H