Tiempo de cambios, en esta pléyade de nuevos espacios y coyunturas, también en el Real Casino Antiguo de Castellón. Marco Antonio Esteve toma el relevo de Víctor Arandés y se ha convertido en presidente de la veterana institución castellonense. Osado y valiente, con un excelente currículum de relaciones sociales, está dispuesto a relanzar a la bicentenaria entidad hacia dos direcciones muy concretas: devolver el Casino para el socio y consolidar la estrecha vinculación de la sociedad castellonense, “sin elitismos de ningún tipo”, con un emblema en la historia y en el devenir ciudadano del Castellón de los últimos 200 años. Quiere hacer del Casino el “gran centro cultural” de la capital de la Plana.

--¿Cuáles son los objetivos en su gestión al frente del Real Casino Antiguo?

--Tres van a ser las líneas básicas en el programa de actuación de la nueva junta directiva. La transparencia, liderada por Francisco López, la estabilidad económica y la dinamización de la actividad en el edificio. El Casino ha de estar abierto a la ciudad, pero también hacer acciones propias para los socios. Rescatar el protagonismo del socio, que se tiene que sentir anfitrión de su propia casa, de la entidad a la que pertenece.

--Sin olvidar la parte relativa a actividades culturales, ¿no?

--Por supuesto. El Casino Antiguo es el referente cultural por excelencia en Castellón. Por su historia, por su ubicación en el centro de la ciudad, en la misma Puerta del Sol, puede atender perfectamente a las demandas y necesidades culturales de los castellonenses. El Casino tiene que ser el gran centro cultural de un Castellón que no dispone de espacios de las características como los que ofrecemos nosotros: biblioteca, salas de conferencias, salones, terrazas, recinto de conciertos… Pero además, por su céntrico emplazamiento, en el mismo corazón de la ciudad. Y que pude ser escenario de grandes manifestaciones artísticas como las desarrolladas en la pasada edición del Mare Nostrum, o en la Nit de l’Art, cuando abrimos las puertas de la institución para todos los castellonenses. Es un objetivo.

--Una de sus preocupaciones es abrir el Casino a los jóvenes y ofrecerles alternativas distintas para sus espacios de ocio.

--Claro. El Casino puede convertirse en un nuevo punto de encuentro para jóvenes de Castellón, que no solamente necesiten charlar o utilizar internet, que eso se ha acabado ya en los tiempos que corren, sino también como punto de encuentro para ver partidos de fútbol, por ejemplo, para unir a los jóvenes en sus afinidades culturales e, incluso, para parejas de matrimonios jóvenes con niños que quieran tomar una copa por la tarde en el centro.

--¿Se ha acabado ya la imagen elitista del Casino Antiguo?

--Castellón ese tema lo tiene superado. Los castellonenses pueden entrar a todos los sitios y, por supuesto, al Casino Antiguo. La institución no es elitista. Se paga una cuota de 35 euros mensuales, mucho menos de lo que se paga en muchas collas de la ciudad y que no ofrecen los atractivos de nuestra institución a todos los niveles de ocio y restauración.

--¿Qué proyectos tiene ‘en mente’ la nueva junta directiva a corto plazo?

--Queremos recuperar la Fiesta de la Primavera, que tuvo tanto éxito hace años, hacer un evento de bienvenida a la ciudad tras el verano, una gran fiesta el sábado, víspera de la Magdalena, como se hacía antes, o los bailes de Carnaval que tuvieron durante su tiempo un gran prestigio.

-Pero, ¿el Casino Antiguo es viable económicamente?

--Yo creo que sí. Vamos hacia la estabilidad económica. Uno de los retos a los que se enfrenta la nueva junta directiva es la situación en que se encuentra el abastecedor. Esto obligó a la junta directiva a presentar el aval. Una de las últimas juntas del anterior presidente acordó interponer una demanda contra el abastecedor, pero hemos sido nosotros los que la hemos presentado. Vamos a hacer lo que sea para mantener el Casino y defender los intereses de los socios y que no se nos acuse de administración desleal. Pero además, gracias al compromiso y la generosidad de los socios, se aprobó una cuota extraordinaria para pagar los atrasos a los trabajadores. Y como presidente, quiero agradecer a los socios su colaboración y a los empleados del Casino su compromiso de mantenerse en sus puestos.

--Y pendientes también de patrocinios, ¿no?

--Sí, por supuesto. Los patrocinios culturales son otra de las apuestas para garantizar la viabilidad económica de una institución que tiene todo un futuro por delante y ofrecer muchas cosas a Castellón. H