La Asociación Provincial de Empresas de la Construcción de Castellón (APECC) valoró ayer que la provincia será “de las más afectadas por la subida del impuesto de bienes inmuebles (IBI)” prevista por el nuevo Gobierno central de Mariano Rajoy. Al respecto, el presidente de APECC, Fermín Renau, recordó que ya hay seis localidades que iban a sufrir una subida del IBI por la revisión catastral desde el 1 de enero de este 2012, “a lo que se va a sumar la prevista por el Ejecutivo”. En esta situación se halla la capital, así como Benafigos, Xodos, Matet, Pina de Montalgrao y Vilar de Canes, localidades con más impacto en parcelas rústicas.

Sobre el alza del IBI del Gobierno, Renau apuntó: “Parece que no va a afectar a todas las viviendas por igual. De inicio, se eximen al 50% de aquellas con menor valor catastral de cada ciudad”.

Y agregó que “después, el incremento afectará según la fecha de la última revisión del catastro. Se supone que en las localidades cuya revisión se haga ahora, esta se adaptará directamente; mientras que a las revisadas entre 2006 y 2008, no variará --al tener ya un valor alto al coincidir con el boom inmobiliario--”.

Las primeras estimaciones apuntan a que casi la mitad de los 135 municipios de Castellón tendrán que revisar el IBI en el tramo más alto, un 10% (como Burriana, Vinaròs, Onda, Peñíscola, Benicarló y Orpesa --al ser los valores catastrales anteriores a 2002--). En otros se aplicará el 6% --de 2003 a 2005-- y el 4% --2009 a 2012--, y otros quedarán exentos --2006 a 2008--. Para Renau, “esta subida, más que desigual, conllevará unificar al alza el IBI. Es decir, a mayor antigüedad del valor, mayor subida. La medida preserva a las de menor valor e incluso se planea bonificar a los hogares más necesitados”. “Si ya era cada vez más difícil mantener un hogar, habitado o no, la subida lo agravará”, añadió. En positivo sí consideró el “respiro” al rescatar la deducción para vivienda en propiedad retroactiva al 2010 y dejar el IVA reducido del 4%. H