Las próximas pruebas de selectividad apenas sufrirán cambios en este curso y finalmente serán tres las jornadas fijadas para realizar los exámenes, entre el 6 y 8 de junio.

Los encargados de la coordinación de las pruebas vienen trabajando con el propósito de mantener la actual estructura y repetir las mismas premisas que han sido habituales hasta la fecha, porque el propósito es que este año sea un periodo de transición cara a la futura implantación de una reválida de los bachilleratos, de ahí que se vayan a dar pocos cambios a lo largo de estas pruebas de junio.

Por otra parte, para aquellos alumnos que no logren superar el examen de acceso a la universidad o pretendan elevar su nota media, estos tendrán la posibilidad de presentarse a nuevas pruebas, que tendrán lugar entre los días 4 y 6 de julio.