El concejal de Urbanismo de Peñíscola, Romualdo Forner, ha asegurado que la construcción de la depuradora de aguas residuales (EDAR) está cumpliendo los plazos previstos. La infraestructura tiene que estar a pleno rendimiento antes del 31 de diciembre, “por cuanto, de lo contrario, España debería pagar una sanción de siete millones de euros”, al incumplir la directiva europea sobre depuración.

Una vez liberados la mayor parte de viales del casco urbano, con la llegada de la temporada estival, en estos momentos se está procediendo a la finalización de la estación de bombeo situada en la plaza Constitución. Se trata de una obra de dos bloques de un piso de altura cada uno, que han generado comentarios y malestar por su impacto visual.

Al respecto, Forner ha indicado que se tomarán “medidas para reducir este impacto”, mediante la colocación de árboles. “Se plantará en la plaza parte del arbolado que actualmente está en los terrenos de la EDAR”, señala, a la vez que comenta que la estación de bombeo se ubicó “en terrenos de titularidad municipal, lo que permitirá recuperar el espacio del antiguo ayuntamiento”.

Y es que el edificio, situado en otro extremo de la plaza Constitución, alberga en los bajos la planta de pretratamiento del emisario submarino, lo que originó el cierre de unas dependencias, ubicadas en primera línea de playa, cuya tasación “únicamente del suelo supera los tres millones de euros. Un inmueble, en desuso que el Ayuntamiento recuperará a través de un cambio por la nueva depuradora”. H