El Villarreal está repesando a alguno de los protagonistas de la década dorada del Submarino. Primero fichó a Nihat, que ha comenzado su aventura en los banquillos en la cantera del club, y ahora es Calleja quien va a seguir el mismo camino que el turco.
El exfutbolista acaba de colgar las botas después de pasar tres temporadas en Osasuna. El madrileño ha recibido varias ofertas de Segunda División A para postergar su jubilación, pero ninguna le ha ilusionado lo suficiente.
Con estos mimbres, hace unos días recibió una llamada de Fernando Roig Negueroles, con el que mantiene “una buena relación” desde que jugara en el Onda, y le ofreció entrenar en las categorías inferiores del Villarreal. Dicho y hecho, a partir de esta semana se pone las órdenes de García Sanjuán, técnico del cadete, para echarle una mano.
NO PIERDE EL GUSANILLO // Javi Calleja no se arrepiente de la reciente decisión de colgar las botas. “Han primado las exigencias familiares a las deportivas, pero tenía claro que iba a seguir en el mundo del fútbol, porque es mi pasión”, reconoce el de Alcalá.
El exjugador amarillo --estuvo siete temporadas en el club, desde el 99 hasta el 06--, está a solo un examen de aprobar los tres carnets nacionales, y no podía dejar escapar esta oportunidad: “Ha sido todo muy rápido, pero estoy encantado porque sé que trabajaré en una de las mejores escuelas de España, la cantera del Villarreal ha progresado muchísimo desde que llegué al filial”.
Calleja recalca “la cantidad de jugadores que este club ha aportado a la élite en los últimos años” y espera poner su granito de arena a partir de ahora: “Entrenar es algo que me ilusiona y me apasiona, pero lo principal es ayudar en todo lo que pueda”.
SIN PRESENTACIONES // El madrileño no necesitará un periodo de adaptación en el club: “Conozco a toda la directiva y conservo la amistad con Unanua o Javi Venta”. De hecho, Calleja coincidió con el lateral derecho y con Marcos Senna en el vestuario: “Los dos están como el primer día”.
El exjugador reconoce que su mejor recuerdo son “todos los amigos” que ha dejado, aunque destaca los éxitos deportivos que siempre le han acompañado: “Es un orgullo que en mi carrera siempre haya cumplido con los objetivos deportivos que nos habíamos marcado a principio de temporada. Nunca he descendido y he conseguido dos ascensos, uno de ellos en el Villarreal”.
Calleja espera ver en la presente campaña un nuevo ascenso del Villarreal, aunque ahora no lo hará sobre el césped, y cree que hay motivos para ser optimista: “Los resultados están siendo bastante buenos, aunque la temporada ser hará larga y hay que puntuar desde el principio”.
El madrileño asegura que “esta categoría es muy traicionera, porque si patinas un par de partidos te puedes venir abajo”, aunque tiene claro que “la calidad es lo que determina los partidos y al Villarreal le sobra”. El examarillo recalca que “la actitud será fundamental” y opina que “se ha buscado un equilibrio en la plantilla con juventud y veteranía que tiene que dar sus frutos”. H
