Fran Escribá no escondió que no le gustaron varias cosas de su Villarreal en Ankara: «Pudimos equivocarnos, pero ya sabíamos que si salíamos al 90% no nos iba a dar para sacar algo positivo». En especial, lo que le desagradó al técnico fue el segundo gol del Osmanlispor, que llegó sin tiempo para asimilar el primero: «Estuvimos espesos en la toma de decisiones y me indigna el segundo gol que nos marcan porque estuvimos a punto de entregar el partido en un minuto».

El técnico no escondía que «en la primera parte el equipo no estuvo bien», admitía también que «la expulsión abrió el partido» y añadía que al final se iba «con un gusto amargo porque se pudo incluso ganar». Eso sí, el valenciano afirma que «por méritos, el empate se puede considerar justo».

NOMBRES PROPIOS // El técnico aprovechó también la rueda de prensa posterior para defender a los teóricos menos habituales: «Sé que se comentará mucho los cambios que se han hecho, pero todos mis jugadores tienen nivel del Villarreal y si no podemos confiar en futbolistas como Pato, Bonera o N’Diaye tenemos un problema». El técnico asumía también que «no se puede dejar de pensar que en menos de 48 horas tenemos un partido contra un rival muy potente», y subraya el partido de Pato, autor del segundo gol, que también provocó el penalti que dejaría en inferioridad numérica al Osmanlispor: «En la segunda parte ha dado un paso adelante y ha enseñado que es un jugador de élite. Han sido sus mejores 45 minutos desde que está con nosotros».

Fran Escribá sacó además la siguiente lectura del encuentro: «Hemos visto que en Europa cualquier equipo es peligroso y eso nos servirá en adelante». Para el entrenador, a partir de ahora será «clave sacar los seis puntos restantes en el Madrigal».

Por último, analizó el cambio táctico con el que comenzó el encuentro, apostando por un 4-3-3 hasta que llegó el segundo gol del Osmanlispor y recuperó el tradicional 4-4-2: «Sabíamos que ellos corriendo iban a ser peligrosos y pusimos a Bruno para frenarlo, pero ni Jona ni N’Diaye estuvieron finos en la creación y en banda no encarábamos como sí hicimos en la segunda parte con un gran Castillejo». H