Los tres próximos refuerzos del Villarreal pueden llegar vía Portugal: Jardel, Andrés Fernández y Adrián López. A las negociaciones en marcha con el Oporto para conseguir una nueva cesión o un traspaso simbólico para la vuelta de Adrián López, se han unido dos nombres más a la agenda con conversaciones en marcha para firmar al central del Benfica y al portero que esta temporada estuvo cedido en el Granada, pero que también, como Adrián, es propiedad del Oporto.
EXPERIENCIA PARA LA ZAGA // Jardel Nivaldo es un experimentado defensa brasileño de 30 años y 1,92 metros de estatura, que la pasada temporada fue uno de los pilares del histórico conjunto portugués, con el que disputó 30 partidos de Liga y ocho en la Liga de Campeones, marcando dos y un gol, respectivamente, en ambas competiciones.
Se trata de un defensa con una buena cultura táctica, técnicamente bien dotado y con una salida del balón desde atrás que se adapta al estilo del Villarreal, y que además domina el juego aéreo, con unas características que se asemejan al perfil de Musacchio, aunque en su contra no posee la velocidad del central argentino, cuyo traspaso al Milan puede hacerse efectivo esta misma semana. Un central en definitiva con experiencia y solvencia para afrontar la Champions y ser competitivo en la Liga española.
No obstante, las negociaciones tampoco están siendo fáciles para el consejero delegado del Villarreal, porque las exigencias del Benfica superan el tope económico marcado por el propio Roig Negueroles en vistas a garantizar el control financiero de la entidad. El Benfica ya exigió 12 millones de euros al Lazio en junio, cifra que fue desestimada por los italianos. Los derechos económicos de Jardel son propiedad del club lisboeta y de la empresa Traffic.
La oferta del Villarreal ronda los ocho millones de euros, con un aumento de las condiciones económicas respecto a lo que percibe en el Benfica para Jardel, al que se le ofrecería un contrato de entre tres y cuatro temporadas.
FICHAJE OBLIGADO // La negativa del Real Madrid a traspasar a Nacho Fernández ha abierto nuevas vías de negociación para potenciar una posición clave en el engranaje del Villarreal como es el eje de la zaga y para la que ahora mismo se cuenta con N’Diaye, Víctor Ruiz, Bonera y Mateo Musacchio, aunque en el caso del argentino su salida del Villarreal se vislumbra como casi segura y con destino a Milán. Las negociaciones con el Benfica continúan.
El tercer jugador que podría llegar en la operación Portugal es el guardameta Andrés Fernández, que pertenece al Oporto, pero con el que la entidad lusa no cuenta para su próximo proyecto.
El exportero de Osasuna, que estuvo a punto de ser firmado por el Villarreal en su regreso a Primera División hace tres años, se halla otra vez en el punto de mira del Submarino, con unas conversaciones que también transcurren por buen camino.
La próxima semana será clave para resolver el futuro de Andrés, que rindió a buen nivel con el Granada la temporada pasada, donde jugó 37 partidos de Liga.
El Villarreal sigue trabajando para reforzar su plantilla, con las dificultades propias de un mercado que ha disparado sus precios, en gran parte a las astronómicas cifras que se barajan en la Premier. El club amarillo quiere seguir siendo fiel a su política de sostenibilidad económica. No obstante, el Villarreal está preparado para afrontar varias operaciones importantes para reforzarse pero dentro de unos parámetros. Jardel, Adrián y Andrés Fernández están en una lista en la que todavía restan por cubrir varios huecos importantes. H
