Juana Rivas se reunió ayer con sus hijos en la ciudad italiana de Cagliari (Cerdeña), y permanecerá con ellos durante 15 días en los que tienen previsto ir a un campamento y visitar un lago, entre otras actividades vacacionales.

Rivas explicó en una conversación telefónica con Efe que pudo ver a sus hijos a las 13.00 horas locales, cuando su expareja, el italiano Francesco Arcuri, se los entregó .

Los niños viven habitualmente con el padre, quien tiene la custodia provisional desde agosto del pasado año, en la pequeña isla de Carloforte (sur de Cerdeña), pero desde hoy y durante 15 días consecutivos pasarán un periodo de vacaciones con su madre.

Juana explicó que tenía mucha ilusión de ver a sus hijos, de 11 y 3 años. «Cuando nos hemos visto me han dicho guapa, guapa, me han acariciado la cara, ha sido muy emotivo, teníamos mucha ilusión», relató la vecina de Maracena (Granada). Contó también que solo les explicó a los menores que iban a poder verse en Italia cuando el Tribunal de Cagliari, encargado de decidir sobre la custodia de los dos niños, ratificó este encuentro el pasado 6 de agosto.

Rivas fue condenada por el Juzgado de lo Penal 1 de Granada a cinco años de cárcel y a seis de inhabilitación para la patria potestad de sus dos hijos por permanecer en paradero desconocido el verano pasado junto a ellos para no entregárselos al padre. El fallo, frente al que ha anunciado un recurso de apelación ante la Audiencia, le condena a pagar las costas procesales.