Cruz Roja Vila-real ha decidido no instalarse en la antigua residencia Santa Ana y San Juan dado el desembolso que supone la adecuación de esta instalación, situada junto a la estación de Renfe. Desde la entidad agradecen a la Fundació Caixa Rural Vila-real el ofrecimiento de cesión del inmueble, aunque ven inviable poder ubicar allí su sede. Ahora, la oenegé busca un nuevo local donde poder trasladarse, ya que sus actuales dependencias, en la calle Calvario, con solo unos 100 metros cuadrados, se quedan pequeñas para desarrollar los servicios y la atención de urgencia que presta a más de un centenar de familias, lo que se traduce en cerca de unas 500 personas.

“Informamos de la posible cesión a Madrid, como debemos hacer, vino un arquitecto para valorar el asunto y se requiere bastante dinero para adecuar el edificio. Por tanto, no nos vamos a mover”, señaló la presidenta de Cruz Roja en Vila-real, María Arrufat. Además del importante desembolso que supondría reubicar las instalaciones en esta antigua residencia de ancianos, su ubicación es otra traba porque para acceder a pie directamente a este espacio es necesario atravesar la pasarela de la estación, al no haber un paso subterráneo.

reunión alcaldía // Ante esta situación, Arrufat confía en los próximos días en poder reunirse con el alcalde de Vila-real, José Benlloch; y la edila de Servicios Sociales, Sabina Escrig, para abordar la necesidad de disponer de un local con mayor capacidad. Y es que, además de prestar ayuda de emergencia, la entidad también requiere de una instalación adecuada para poder impartir cursos homologados destinados a personas con escasos recursos. “Estamos esperando a que el alcalde y la concejala, tras las elecciones, se aposenten y poder hablar con ellos e intentar buscar una solución”, ha explicado la responsable de Cruz Roja.

El tema de la sede preocupa a la entidad al igual que ocurre con la falta de fondos. “A finales de mayo ya habíamos agotado tres cuartas partes del presupuesto que teníamos para este año. Estamos desbordados, ya que ayudamos a familias sin recursos a poder pagar el alquiler, la luz o unas gafas”, ha apuntado la presidenta local de esta entidad, que cuenta con más de 800 socios y un centenar de voluntarios. H